El sector sanitario se ha convertido en la industria más atacada por los ciberdelincuentes, con un costo medio de una violación de 10,93 millones de dólares, más del doble que la siguiente industria más cercana. Estas violaciones no solo afectan la salud financiera de las organizaciones, sino que también comprometen su capacidad para ofrecer una atención de calidad, con un tiempo medio de detección y contención de 200 días.
El impacto de las violaciones de ciberseguridad en la sanidad va más allá de las pérdidas financieras; afecta significativamente la atención y seguridad de los pacientes. Un estudio del Instituto Ponemon de 2023 reveló que el 43% de las organizaciones sanitarias informaron de efectos adversos en la atención a los pacientes debido a la pérdida de datos, y el 46% observó un aumento en las tasas de mortalidad tras tales incidentes. Estas estadísticas subrayan la importancia crítica de proteger la información de los pacientes y los sistemas sanitarios frente a las amenazas cibernéticas, destacando que las vidas están en juego.
Las organizaciones sanitarias son particularmente vulnerables a las amenazas cibernéticas por varias razones. Primero, el alto valor de los datos de los pacientes almacenados en los registros electrónicos de salud (EHR) convierte al sector en un objetivo principal. Segundo, la naturaleza interconectada de los sistemas sanitarios introduce vulnerabilidades, ya que los datos compartidos entre proveedores, compañías de seguros y terceros crean múltiples puntos de entrada potenciales para los ataques. Tercero, la proliferación de dispositivos del Internet de las Cosas Médicas (IoMT), como bombas de insulina y marcapasos, que a menudo carecen de medidas robustas de ciberseguridad, supone riesgos significativos. Por último, las tecnologías y las infraestructuras obsoletas, comunes en la sanidad, son más susceptibles a la explotación debido a vulnerabilidades no parcheadas y la falta de controles de seguridad modernos.
Para protegerse de estas vulnerabilidades, las organizaciones sanitarias deben adoptar medidas proactivas y mejores prácticas. La implementación de una estrategia de confianza cero basada en la identidad, que enfatiza la verificación estricta de la identidad para todos los intentos de acceso, es crucial. Este enfoque ayuda a garantizar un acceso seguro a los datos, aplicaciones, redes y servicios, reduciendo el riesgo de accesos no autorizados y violaciones.
Equilibrar la seguridad con una experiencia positiva del usuario también es esencial. Una experiencia total segura prioriza tanto la seguridad como el acceso fluido a la información, lo cual es vital en la sanidad. Lograr este equilibrio requiere la colaboración entre expertos en TI, expertos en seguridad, diseñadores de UX y profesionales sanitarios para crear sistemas que protejan los datos mientras proporcionan una experiencia eficiente al usuario, mejorando la confianza y la satisfacción entre las partes interesadas.
Además, una estrategia de puerta de entrada digital bien definida es fundamental, ya que sirve como la interfaz principal para pacientes, cuidadores, proveedores y vendedores. Esta estrategia no solo mejora la conveniencia y la accesibilidad, sino que también garantiza la privacidad y la seguridad de los datos, fomentando la confianza y la lealtad dentro del ecosistema sanitario.
La educación y la formación también son clave para lograr una experiencia total segura. La formación regular para los profesionales sanitarios sobre mejores prácticas, identificación de amenazas y protocolos de respuesta puede aumentar la conciencia y fomentar una cultura de ciberseguridad, empoderando a los empleados para proteger activamente los datos de los pacientes.
La crisis de violaciones de datos de un billón de dólares en la sanidad es una amenaza crítica para la seguridad y privacidad de los pacientes. Abordar esta crisis requiere medidas proactivas y colaboración entre las organizaciones sanitarias, las partes interesadas de la industria, los proveedores terceros y los profesionales. Al invertir en medidas robustas de ciberseguridad, ofrecer una experiencia excepcional al usuario, implementar una estrategia de puerta de entrada digital y priorizar la educación y la formación, la industria sanitaria puede mitigar los riesgos cibernéticos y proteger la salud de los pacientes en un entorno cada vez más complejo.
Source: HIT Consultan
Para mitigar posibles amenazas, es importante implementar medidas adicionales de ciberseguridad con la ayuda de un socio de confianza como INFRA www.infrascan.net o puede intentarlo usted mismo utilizando check.website.