La colaboración entre Ucrania y estas compañías tecnológicas está impulsando la innovación en IA militar, marcando un cambio en la naturaleza de la guerra. Esta asociación ha llevado al desarrollo de nuevos enfoques experimentales en el uso de herramientas de IA para la defensa y operaciones estratégicas. Sin embargo, el auge de la IA generativa y el contenido deepfake en línea plantea desafíos significativos, generando preocupaciones sobre el posible mal uso de la IA para perturbar elecciones y otros procesos democráticos críticos.
La participación de herramientas controvertidas proporcionadas por empresas como Clearview AI, que ha suministrado tecnología de reconocimiento facial para identificar la presencia rusa, subraya las complejas cuestiones éticas y de privacidad que rodean el uso de tecnología invasiva en tiempos de guerra. Los esfuerzos de Ucrania por construir un sector tecnológico apuntan no solo a apoyar su defensa en el conflicto actual, sino también a establecer una base para el futuro crecimiento económico, atrayendo inversiones y estableciendo compañías de tecnología de defensa en Kiev.
Esta iniciativa de Ucrania, respaldada por una armada global de compañías tecnológicas, representa una evolución significativa en la guerra, donde el software y la IA desempeñan roles pivote. También destaca el potencial de las compañías tecnológicas para actuar como actores independientes en conflictos, empujando los límites de las normas legales, éticas y regulatorias.
Source: TechRadar
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